Por prescripción médica la ex presidenta está recuperándose lentamente del accidente sufrido en su domicilio. A raíz de ese hecho está en cama. Contrariamente a lo que se había informado en aquella oportunidad, la intervención quirúrgica se debió a una fractura que dividió en dos partes a uno de los dos huesos que conforman el antebrazo derecho, actualmente enyesado desde el codo hasta la mano. Solo le quedan descubiertas las puntas de los cuatro dedos largos. Por ello, está impedida de utilizar su brazo y mano derechos, no pudiendo firmar.

La aplicación de anestesia total para la operación, le produjo un edema pulmonar, problema este que está virtualmente superado aunque precisa cuidados. El tiempo de su restablecimiento total es estimado en no menos de 30 días de reposo, para recuperarse asimismo de la debilidad provocada por la pérdida de sangre.

A las incomodidades y dolores que está padeciendo, se agregan diversos machucones en el cuerpo y un golpe en la cabeza, aunque no le significan ningún riesgo.

Se siente ahora más tranquila luego de la traumática sorpresa del 12 de enero último. Si bien estaba enterada de que se presentaría un pedido de extradición contra ella, no suponía, ni sus abogados tampoco, que el trámite comenzaría por detenerla de inmediato en el frío anochecer de aquel día (a las 21 hora de España) muy difícil de olvidar totalmente. También, al entrar al juzgado, un grupo de 6 argentinos le gritó repetidas veces "Asesina". Nadie sabe cómo se enteraron tan rápidamente. A partir de allí, las autoridades judiciales han tomado recaudos de seguridad y desde su segunda comparencia su auto pudo utilizar una entrada reservada.

Un muy reducido grupo de amigos íntimos en Madrid, como un cura de su parroquia, la visitan por momentos y están pendientes de cuanto pueda precisar. Una alta pila de cartas y telegramas expresándole solidaridad, le da aliento y espera el momento de poder contestarlos. Bettini, el embajador argentino en España, ha llamado a la casa de Isabelita para interesarse por el estado de su salud.

Situación legal

Al ex presidente Eduardo Duhalde, que estuvo unos días en Madrid donde dio una conferencia, Isabelita le hizo llegar su agradecimiento por haberle ofrecido sus servicios como abogado.

Los pedidos de extradición solicitados por los jueces argentinos Néstor Acosta (San Rafael – Mendoza) y Norberto Oyarbide (Capital Federal) están bajo la atención del mismo juez español Juan del Olmo, quien deberá seguir el trámite legal que rige en ese país. Por ahora no se ha dado traslado a los abogados de Isabelita del contenido de las dos acusaciones para justificar el pedido de extradición. A partir de ese momento, cuando los letrados tengan en sus manos copias de los cargos formulados a su defendida, dispondrán de un plazo de 40 días (que puede ser ampliable) para responder.

Según apreciaciones de medios judiciales españoles, la definición de este trámite muy probablemente no tendría lugar en el transcurso del presente año 2007.

El proceso puede ser largo y la última instancia, luego de varios pasos legales, es la determinación que deberá tomar el presidente de España José Luis Rodríguez Zapatero.